Hace unos meses atrás, les propusimos un primer acercamiento a la región de Calabria a través de algunos sitios ubicados en su zona sur. De esta manera, hablamos de lo que es posible realizar y visitar en Scilla, Reggio Calabria y Pentedattilo. Sin embargo, dicho territorio es sumamente basto y comprende numerosos rincones que esperan a ser explorados. Es por ello que, en la presente nota, les traemos tres nuevos lugares costeros que no pueden dejar de ver en esta zona.
¡Vamos a conocer más de Calabria! ¿Están preparados?
Las aguas cristalinas de Tropea
Esta es una parada casi obligatoria si querés darte un buen baño. Tropea es una pequeña localidad ubicada en la costa oeste y que se distingue por sus aguas transparentes y limpias. Además, sus playas se ubican en la parte baja de un acantilado, mientras que su centro se halla en la parte alta. El contraste producido por dicho desnivel regala un paisaje incomparable.
Sumado a ello, a pocos metros del inicio de la playa, es posible observar cómo una roca gigante se adentra en el mar. Sobre ella, se asienta el santuario Santa Maria dell’Isola, cuya existencia aparece ya mencionada en los textos del 1066. En la actualidad, es posible visitarlo desde las 9 a las 20 h y se accede a través de un camino de escaleras.
Tropea también es el lugar de la cebolla roja dulce. Por ello, es una buena idea almorzar o cenar con algún plato que la contenga. Por ejemplo, en la playa, cerca del santuario encontramos un quiosco que vende snacks, bebidas y sándwiches. Allí, es posible pedir un panino típico de salchicha con cebolla. Su sabor es incomparable y cuesta menos de 5 euros. Si, por el contrario, el hambre te llega mientras estás en la parte alta, una buena opción es el bar Tomate.
Más de Calabria: Pizzo
Seguimos avanzando hacia el norte y damos con el pequeño municipio de Pizzo. Antes de adentrarse en la ciudad misma, vale la pena llegar hasta la pequeña iglesia de Piedigrotta, construida dentro de una cueva. Su origen se remonta hacia el año 1600. La leyenda cuenta que un grupo de marineros que lograron salvarse de una tempestad la construyeron en honor a la Virgen que llevaban en el barco y que los salvó. Sin embargo, el pequeño lugar de culto tomó mayor forma cuando el artista local Angelo Barone decidió agradarla y llenarla de estatuas. Hoy en día, puede visitarse pagando 3 euros. En su interior, es posible encontrar varias figuras importantes de la iglesia católica.
Volviendo a la localidad de Pizzo, un buen plan es realizar un paseo a pie para admirar el encanto del lugar. En especial, no podés perderte el atardecer en el mirador La Balconata. Allí, se encuentra la escultura “Il collezionista di venti”, un hombre de hierro que mira hacia el mar. El artista Edoardo Tresoldi, quien también creó las columnas que se hallan en el paseo marítimo de Reggio Calabria, es su autor.
Otra actividad imposible de no llevar a cabo es probar el tartufo. Se trata de un postre realizado con helado que se elabora solamente aquí. Te recomendamos comprarlo en un local un poco alejado del centro llamado L’angolo del gelato. Allí, el tartufo es de elaboración propia, su precio es razonable y los dueños son muy simpáticos.
Un Diamante más de Calabria
Continuamos el viaje hacia el norte y casi llegamos a la próxima región, pero nos frenamos antes en la localidad de Diamante. Esta es conocida como la Ciudad de los Murales, debido a que en sus paredes es posible encontrar alrededor de 150 pinturas escondidas en diferentes rincones. Entre ellas, se hallan representaciones de la vida cotidiana ‒pescadores en plena actividad, obreros reposando‒, imágenes de denuncia social y pinturas que dejan ver el lado imaginativo del ser humano. Es así que una buena idea es hacer un paseo por el centro para dar con tu mural preferido.
Luego, es posible darse un baño en el mar. Para ello, se deben tomar las escaleras, llegar a la parte baja y atravesar el pequeño río que divide al centro de la playa. La misma, a diferencia de Tropea, es más extensa y se presenta ante un mar abierto. ¡Otro tipo de playa, pero con igual belleza!
Ahora que sabemos más de Calabria, ¿se animan a descubrirla en persona?
Autora foto de portada: Camila Ramos
Genial