A la hora de hablar de vino, la provincia de Mendoza es una de las más importantes en todo el mundo. Esta vez, los mendocinos vuelven a ser noticia y nuevamente gracias al vino. Este mes, el Hospital Central, el más grande de Mendoza, se convirtió en el primero de América en tener un viñedo en sus jardines. Esta iniciativa se completó gracias a la colaboración del Fondo Vitivinícola. Según los directivos de ambas instituciones es la primera de muchas otras acciones que buscan enlazar a los distintos sectores productivos de Mendoza. El Hospital Central funciona en Mendoza desde 1945, momento en que se inauguró formalmente.
El Fondo Vitivinícola, crucial para la industria del vino en la provincia
El Fondo Vitivinícola, principal impulsor de la iniciativa, es un organismo que permanentemente trabaja para y por quienes forman parte de la industria del vino. Eso incluye tanto la ayuda a pequeños productores, la educación y la generación de encuentros en los que el protagonista indiscutido es el vino. Hoy en día, el Fondo, gestor del Acuerdo Mendoza-San Juan sobre diversificación vitivinícola, realiza distintas acciones. Entre ellas, se cuentan la promoción del consumo responsable del vino, la difusión de la cultura de la vid y el vino. También, quienes forman parte de él, contribuyen al desarrollo armónico de la vitivinicultura Argentina.
El Hospital Central, un emblema de la salud pública para los mendocinos
En 1938 se buscaba fundar un nosocomio que pudiera hacerle frente a la creciente demanda de servicios sanitarios. Así nació el Policlínico Central, un lugar que brindaba atención médica y funcionaba en un terreno otorgado por la familia Calle. El lugar fue creciendo e incorporando más servicios y prestaciones. Sin embargo, en 1944, cuando la construcción aún no había culminado, en San Juan se produce un terremoto de gran magnitud. En ese contexto, tanto las autoridades nacionales como las provinciales habilitan el hospital ya denominado Hospital Central para atender a muchos de los lesionados por el terremoto. Una vez que todos heridos fueron atendidos, el edificio se volvió a cerrar hasta que culminaran sus obras de construcción. Un año después, el 19 de agosto de 1945, el Hospital Central quedó abierto permanentemente.
El viñedo instalado en el hospital
Las plantas de vid que se instalaron en el hospital central son dos paños de Malbec. Esta es una de las cepas que en Argentina da vinos reconocidos y premiados en todo el mundo. El Malbec, originario de Francia, llegó a Mendoza a mediados del siglo XIX gracias al plan de Domingo Faustino Sarmiento para renovar la industria vitivinícola del país. Los primeros viñedos que se implantaron en la provincia datan de 1861, en Panquehua. Posteriormente, gracias a la llegada de italianos y franceses se fueron expandiendo en distintas zonas de la provincia. Las plantas de vid que hoy están en el Hospital Central fueron donadas por el Vivero Mercier. Son un total de 100 ejemplares certificados de Malbec clon Mercier 505, injertadas sobre el pie americano Paulsen 1103.
El aniversario del Hospital Central, entre homenajes y celebraciones
La inauguración del viñedo dentro del predio del Hospital Central fue parte de los festejos por la conmemoración de sus 77 años de vida. Además, hubo una serie de celebraciones y homenajes destinados a recordar la importancia de este nosocomio y su personal. El 26 de agosto pasado, en el Teatro Independencia, se presentó la Orquesta Filarmónica de Mendoza. Este cuerpo musical homenajeó al hospital con un programa llamado “Fiestas Romanas”. El acto por el aniversario también fue un momento cargado de emotividad para quienes forman parte de la comunidad del hospital. En él se le brindó reconocimiento a quienes se jubilarán este año y también a reconocidos médicos que fallecieron en lo que va de 2022.
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