El Rosedal es uno de los lugares más bellos dentro del Parque General San Martín además de uno de los más visitados. Está ubicado en uno de los costados del Parque, frente al lago y próximo a la Fuente de los Continentes. A su alrededor, además, hay otros emblemáticos sitios como el Museo de Ciencias Naturales Juan Cornelio Moyano y el Club Mendoza de Regatas. El Rosedal fue diseñado bajo los lineamientos de las escuelas paisajísticas francesa e inglesa y cuenta con escalinatas de piedra y asientos de madera. Allí, los mendocinos se sientan a contemplar el atardecer frente al lago y a disfrutar del aroma de los más de 4500 rosales que existen allí.
Los rosedales en el mundo y la idea de tener un rosedal mendocino
El primer rosedal del mundo se creó en 1894 y se encuentra en Valle de Marne, Francia. Ya existían además, otras colecciones en Inglaterra y Alemania, en este último país está el Europa-Rosarium, el rosedal más grande del mundo. Mientras tanto, el primero de Argentina fue el Rosedal de Palermo que se inauguró en 1914. En Italia, la Rosaleda Comunal de Roma está emplazada desde 1950 sobre un antiguo cementerio hebraico. Allí, cualquiera que resida en Roma puede plantar y cuidar su propio rosal. En Mendoza, desde finales de la década del 10 del siglo pasado se hicieron diferentes trabajos para embellecer el Parque. El diseño original, creado por Carlos Thays en 1896, no incluía flores. Por eso, Raúl Jacinto Álvarez, el director de Obras Públicas de la provincia, proyectó un jardín de rosas similar a los ya existentes en Francia e Inglaterra.
La inauguración de El Rosedal
El Rosedal de Mendoza se inauguró el 31 de diciembre de 1919 durante el gobierno de José Néstor Lencinas. Las actividades y los festejos por la inauguración duraron hasta el 8 de enero de 1920. Ese día, hubo paseos en carreta, juegos y una regata en el lago como cierre. Por aquel entonces, el Rosedal fue llamado Presidente Yrigoyen, en honor a Hipólito Yrigoyen, quien encabezaba el poder ejecutivo nacional. Desde el momento de su inauguración, el Rosedal se convirtió en uno de los sitios más visitados. Mendocinos y turistas llegan no solo atraídos por las rosas sino también por las esculturas, pérgolas y escalinatas que le dan al sitio una identidad única.
Un espacio tradicional para los mendocinos
Con el correr de los años, el Rosedal se transformó en un lugar indispensable para la ciudad. Allí, no solo los transeúntes se detienen a contemplar las rosas y las palmeras de alrededor. Hay quienes utilizan el espacio, rodeado de pasto y suelos firmes para hacer entrenamientos físicos y quienes hacen románticas meriendas y picnics. También, el sitio es uno de los más utilizados por los fotógrafos para hacer los álbumes de fotos y videos para quinceañeras y novios a punto de casarse. Muchos de ellos, posan frente al lado, alrededor de las rosas, entre las pérgolas y los bancos de madera. Hasta hace tres décadas atrás, las fotos también incluían al aclamado Mississippi, el barco de tres pisos que durante años fue el escenario de varios eventos sociales.
“Rosedal” by PabloBD is licensed under CC BY-SA 2.0
La restauración de El Rosedal
En octubre de 2018 iniciaron las tareas de restauración del Rosedal. En ese momento, se plantaron alrededor de 5000 nuevos rosales de más de 40 variedades diferentes. También se redistribuyeron los espacios existentes y se crearon nuevos canteros íntegramente repletos de rosas en los que el riego de las especies es más fácil y efectivo. Allí, además, se restauraron las pérgolas, las ocho esculturas originales y los bancos. Las rosas que hoy están en El Rosedal cuentan con una certificación de origen que las declara como originarias de Francia, Alemania, Holanda e Inglaterra. La particularidad que tienen todas las rosas del Parque es que para que crezcan mejor y más fuertes están injertadas sobre rosa mosqueta, una variedad que se adapta mejor a los suelos mendocinos. ¿Visitaste alguna vez El Rosedal? Contanos en los comentarios.
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