Luego de su clase magistral sobre dieta mediterránea, el reconocido chef David Veltri conversó con itMendoza y nos hizo viajar a Calabria a través de su cocina.
La dieta mediterránea, tal y como les comentó a los 80 asistentes de su clase, adquirió su fama gracias a una investigación que detectó que en dicha zona existía un menor índice de enfermedades cardiovasculares y seniles. Es que, el alto consumo de verduras y el poco consumo de grasas animales, según se comprobó, evitaba el aumento del colesterol y los riesgos de padecer alzheimer, entre otras patologías. Pero, como bien advirtió Veltri, la dieta mediterránea es más que un plan alimenticio: es un verdadero estilo de vida.
Además del ejercicio físico, el consumo de grasas vegetales como el aceite de oliva y de carne de pescado, ayudan a mantener un organismo saludable.
La cocina calabresa para David Veltri
Luego de la exposición, David Veltri enseñó cómo se adaptó la gastronomía calabresa a esta dieta y presentó sus platos y productos típicos. Así, prepararon crostini y bruschette con cebolla caramelizada (morada, típica de Tropea) con vino tinto y azúcar negra, y con vegetales grillados, entre otras. Además, cocinaron berenjenas a la parmesana, pero no como la nona, sino estilo gourmet, en un aro, como para restaurante. La pasta estrella fue spaghetti con aglio, olio e peperoncino con la variante calabresa que incluye la ‘nduja, un embutido típico de dicha región. Y finalmente, de postre, se deleitaron con los turdilli.
Berenjenas a la parmesana por David Veltri.
Para David Veltri la cocina italiana desde siempre fue una pasión, pero no la única. Su otra pasión es la docencia como medio para difundir la cultura italiana y cuando habla de esto, realmente se emociona.
Veltri también explicó que a la hora de mantener vivas las tradiciones, es importante distinguir los tres tipos de gastronomía italiana: la tradicional (“la de la nonna”), la moderna (gourmet) y la inmigrante. Por ejemplo, la cocina moderna dejó de lado la fuente grande para preparar el tiramisú y la inmigrante sumó la carne, la cual en el caso de Argentina era de fácil acceso.
“Nunca sabemos todo, estamos en continuo aprendizaje. Aprendo mucho de mis ayudantes e incluso de las abuelas, a quienes les pido que me pasen sus recetas, porque cada pueblo las fue adaptando con lo que tenía”, reflexionó. Es que se calcula que llegaron a Argentina unos 500 mil calabreses, y por lo tanto, unos 3 millones de argentinos son de origen calabrés.
La dieta mediterránea en Mendoza
Nuestra provincia, tal como señaló Veltri, es ideal para desarrollar este sano estilo de vida. Además del vino, contamos con gran variedad de verduras y excelentes aceites de oliva. En tanto, remarcó que una de las cuestiones clave es la cocción: “el fuego es un amigo siempre y cuando lo controlemos, para no quitar nutrientes”. Por eso, privilegia asar, hornear y grillar en vez de freír (porque esto además genera adicción en el organismo).
“Mendoza es preciosa, tiene un encanto particular, con sus olivares y bodegas”, elogió Veltri. Reconoció que se ha convertido en un polo gastronómico y explicó: “comer es un hábito, lo hacemos 4 veces por día, más que otra cosa”. Y además, está íntimamente vinculado con el turismo. En el caso de Mendoza, festejó esta nueva faceta y señaló que trajo consigo profesionalismo: el crecimiento “obliga a ser mejor y más responsable”.
Cierre de lujo: cóctel para la comunidad italiana en Mendoza
La jornada de Veltri finalizó con un cóctel para la comunidad italiana en Mendoza. Los invitados tuvieron la oportunidad de degustar platos propios de la Región de Calabria preparados por Veltri y sus estudiantes de la Escuela Islas Malvinas. Veltri agradeció especialmente a FECARA y FACA por convocarlo para promover la dieta calabresa y mediterránea. Por su parte, el cónsul de Italia en Mendoza, Ivo Polacco, celebró particularmente la realización de la actividad ya que se trata de algo nuevo que además incluye a “la juventud, lo que permite mantener viva la tradición en vez de conformarse solo con recuerdos”.
David Veltri junto a los anfitriones.
