Los valles mendocinos enamoran a cualquiera, gracias a nuestra Cordillera de los Andes que nos regala preciosos y verdes valles. ¿Los conocemos? Uspallata, Valle de Uco, Las Leñas, Valle Grande y Valle Hermoso… ¡Seguro alguno les suena!
Los Valles del sur
El sur de nuestra provincia ofrece paisajes imponentes, como el Cañón del Atuel, en Valle Grande. Se trata de un imperdible recorrido por formaciones geológicas todas diferentes y de atractivos colores.
Los Molles, Las Leñas y Valle Hermoso
Estos tres valles ubicados en Malargüe son el paraíso para los amantes del esquí y la pesca o el relax. Los Molles se destaca por sus aguas termales. En tanto, Las Leñas es uno de los centros de esquí más importantes del país por la calidad de su nieve y la extensión de sus pistas. Y Valle Hermoso es el preferido del verano. N hace falta que digamos por qué, ¿no?
El Valle de Uco
Aquí se encuentran lujosas bodegas, alojamientos y restaurantes ya que además de su belleza, el suelo del Valle de Uco es ideal para el cultivo de la vid y, por lo tanto para la producción de vinos que han sido premiados internacionalmente.
Frutales, ríos y arroyos bajo el imponente volcán Tupungato invitan a recorrer este hermoso valle a mendocinos y turistas durante todo el año.
Uspallata
Este valle se ubica al noreste de la Ciudad de Mendoza y lo alimentan el Río Mendoza y los arroyos San Alberto y Uspallata. Es nuestro valle más extenso y además de su peculiar belleza, ha sido escenario de hitos históricos y cinematográficos.
Pero además ofrece todas las posibilidades para practicar turismo aventura y vacacional, como pesca, trekking y cabalgata. Mendocinos, argentinos de todos los rincones del país e incluso del mundo (italianos, franceses, españoles y estadounidenses, entre otros) se enamoran cada año de sus hermosas alamedas y de su tranquila villa.
Un lugar de película
Uspallata fue el sitio elegido por Jean-Jacques Annaud para filmar Siete años en el Tibet, protagonizada por Brad Pitt. pasando la Villa de Uspallata, a unos 9 km hacia el sureste, encontraremos el Cerro Siete Colores, una imponente montaña que deslumbra por sus diferentes tonalidades. Dicen que no tiene nada que envidiarle a los cerros de la Quebrada de Huamuaca, en la provincia de Jujuy.
Pero Uspallata pasó a la historia mucho antes porque allí se concentró el ejército libertador comando por San Martín antes del cruce de Los Andes.
Asimismo, mucho antes, 1000 años atrás, nuestros pueblos originarios los huarpes, grabaron imágenes sobre las piedras del cerro aledaño Tunduqueral. Se traba de un lugar sagrado donde se realizaban diferentes rituales.
También son famosas las bóvedas construidas por los jesuitas para fundir los minerales que extraían de la mina de Paramillos. Luego, San Martín y su ejército usaron las bóvedas como oficinas y campamento para planificar el histórico cruce a Chile para liberarnos de España.
Autor imagen de portada: Mariano Mantel
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